OCTUBRE. -- El primer dia de escuela. -- Nuestro maestro. -- Una desgracia. --
El muchacho calabrés. -- Mis compañeros. -- Un rasgo generoso. -- Mi maestra de la primera clase superior. -- En una buhardilla. -- Lámina. -- La escuela. -- El pequeño patriota paduano. -- NOVIEMBRE. -- El deshollinador. -- El dia de difuntos. -- Mi amigo Garrone. -- El carnero y el señor. -- La maestra de mi hermano. -- Mi madre. -- Mi compañiero coretti. -- El director. -- Los soldados. -- El protector de nelli. -- El primero de la clase. -- El pequeño vigía lombardo (Cuento mensual. -- Los pobres. -- DICIEMBRE. -- El comerciante. -- El presumido. -- Lámina. -- La primera nevada El albañilito. -- Una bola de nieve. -- Las maestras. -- En casa del herido. -- El pequeño escribiente. -- florentino (Cuento mensual.)La voluntad. -- Gratitud. -- ENERO. --- El maestro suplente. -- La biblioteca de stardi. -- El hijo del herrero. -- Una visita agradable. -- Los funerales de Victor Manuel. -- Franti Expulsado de la escuela. -- El tamborcillo sardo (cuenta mensual). -- El amor a la plata. -- Envidia. -- La madre de franti. -- Esperanza. -- FEBRERO. -- Una medalla bien dada. -- buenos propósitos. -- El tren de juguete. -- Lámina. -- Soberbia. -- Los heridos del trabajo. -- El preso. -- El taller. -- El payasito. -- El último dia carnavaLes muchachos ciegos. -- El maestro enfermo. -- La calle. -- Las clase nocturnas. -- La lucha. -- Los padres de los chicos. -- El numero 78. -- Lámina. -- El chiquito muerto. -- La víspera del 14 de marzo. -- Distribución de premios. -- Litigio. -- Mi hermana. -- El albañilito moribundo. -- El conde de cavour. -- ABRIL. -- Primavera. -- El rey humberto. -- El asilo infantil. -- En clase de gimnasia. -- El maestro de mi padre. -- Convalecencia. -- Los amigos obreros. -- La madre de gorrone. -- José mazzini. -- Lámina

Este libro trata.El profesor se presentó y nos animó a portarse bien y ser una verdadera familia ya que él no tiene familia.
Empezó a dictar, paseando entre los bancos, y al ver a un chico que tenía la cara muy enrojecida y con unos granitos, dejó de dictar, le tomó la barbilla y le preguntó qué tenía, tocándole la frente para ver si tenía fiebre. En ese momento un chico se puso de pie y empezó a bufonear a espaldas de él. Se volvió de pronto, como si lo hubiera adivinado, y el muchacho se sentó y esperó el castigo, con la cabeza baja y encarnado como la grana.